LA TIERRA SE MUEVE

definitivamente estas lineas vienen teñidas con el color de la tristeza, ayer por la tarde (18:40) se produjo un inesperado terremoto en la costa peruana, provocando pánico, caos, desconcierto y sobretodo pena en todos nosotros, para muchos ésta ha sido la primera experiencia sísmica de alta magnitud por lo que el impacto emocional debe haber sido mayúsculo, por mi parte ya tengo en mi haber dos experiencias anteriores lo cual no me exonera del susto y desconcierto pero si algo de tranquilidad me otorga. Solo pienso respecto a lo efímero de la vida y como puede un evento de estos modificar la vida de miles, una profunda reflexión tambien se merece el hecho que a sabiendas que el Perú es un país con antecedentes sísmicos poca sea la importancia que se le da a la planificación y a las medidas de prevención, me cuenta un familiar que el terremoto lo pilló en el centro de lima a pocas cuadras de mesa redonda, y que en la galería donde estaba se dispuso el cierre de las puertas a fin de "evitar saqueos", sin recordar que hace unos años mas de 30 personas murieron asfixiados en una galería por similar medida (recordar el incendio de fin de año en mesa redonda). Seremos mas las víctimas de estas catástrofes en cuanto sigan existiendo gentes necias que invocando la seguridad de su negocio ponen en riesgo la vida de otras personas (clientes y empleados), basta con anteponer el dinero a la vida humana, todos tenemos derecho a preservar nuestra vida y ello no debe estar sujeto a la voluntad de la mezquindad de algunos, sin embargo, y punto aparte, cabe agradecer la labor desinteresada de personal de la policía nacional, que como siempre se faja en los momentos en que las papas queman pues mientras miles de limeños pretendían volver a casa por todos los medios posibles, mis bien ponderados y queridos "tombos y tombas" se quedaron hasta el último para descongestionar el trafico y en las labores de apoyo, del mismo modo mi agradecimiento a los miembros de la benemérita cuerpo de bomberos prestando apoyo en los peores momentos, a pesar de las carencias de recursos y de contar con infraestructura que pide a gritos ser renovada (deben ser los primeros en ser repotenciados) presta su ayuda a traves de sus valerosos voluntarios, gracias mil a estos enormes peruanos que demuestran que podemos hacer un país en serio, que contamos con la gente necesaria. Desde estas anónimas lineas mi respeto y oración por los miles de damnificados del sur medio y quiera Dios que la fuerza implacable de la naturaleza sea calmada......